Calidad
El Área de Calidad de Aguas tiene encomendado el control y seguimiento de la calidad de las masas de agua subterránea de la demarcación del Ebro. Entre sus tareas principales está el diseño, la explotación y la mejora permanente, de las redes de seguimiento de la calidad de las aguas subterráneas.
La Confederación Hidrográfica del Ebro inició en 1995 la observación de las características químicas de las aguas subterráneas de la cuenca con la puesta en marcha de la Red ICA (Red Integrada de Calidad de Aguas), que estaba formada por 135 puntos de muestreo.
Posteriormente, se han ido desarrollando nuevas líneas de trabajo que tienen por objetivo conocer mejor los aspectos relacionados con la contaminación de los acuíferos, siendo el principal problema el de la contaminación difusa por nitratos de origen agrario, que afecta parcialmente a una cuarta parte de los acuíferos de la cuenca.
Con la entrada en vigor de la Directiva Marco del Agua ha sido preciso realizar una reestructuración de los programas de seguimiento para adaptarse a sus disposiciones. Actualmente el control de calidad de las aguas subterráneas cuenta con tres programas de seguimiento: Control de Vigilancia (RBAS), Control Operativo (RNIT, RTEND, RPLAG, RCON), y Control de Zonas Protegidas (R500).
La información analítica de estos programas de seguimiento puede consultarse públicamente a través de la aplicación de "CONSULTA DE DATOS ANALÍTICOS". Únicamente está restringida la consulta de datos correspondiente al Control Operativo – Red de Control de Contaminaciones Puntuales (RCON) ya que sus datos forman parte de expedientes administrativos en tramitación.
A partir de la toda la información recabada en los programas de seguimiento se puede evaluar el estado químico de cada masa de agua subterránea y analizar el alcance y la evolución de los procesos de contaminación (puntual o difusa) que se hayan podido detectar.