Evaluación del Estado Químico
La Directiva 2006/118/CE (DAS) establece que la evaluación del estado químico debe llevarse a cabo para todas aquellas masas de agua subterránea que estén en riesgo de no cumplir los objetivos del artículo 4 de la Directiva 2000/60/CE (DMA), en relación con cada uno de los contaminantes que contribuyen a esa caracterización de la masa de agua.
La evaluación del estado químico de una masa o grupo de masas de agua subterránea, deberá realizarse de forma global para toda la masa con los indicadores calculados a partir de los valores de concentraciones de contaminantes obtenidos en los puntos de control. Para ello se utilizarán las normas de calidad y los valores umbral que se establezcan para los contaminantes, grupos de contaminantes e indicadores de contaminación que se hayan identificado para clasificar las masas de agua subterránea.
Con motivo del Reporting del artículo 13 de la DMA relativo a los planes hidrológicos de cuenca, en 2014 se identificaron 71 masas de agua subterránea en riesgo de no cumplir el buen estado químico.
El procedimiento de evaluación del estado químico de las masas de agua subterránea se realiza con periodicidad anual y se lleva a cabo en dos fases:
- Fase 1: verificar si se ha excedido alguno de los valores umbral o normas de calidad. Si no se han producido excesos en ninguno de los puntos de control, el estado de la masa de agua subterránea será bueno.
- Fase 2: en caso de que se haya superado una o más veces una norma de calidad o valor umbral, debe llevarse a cabo una investigación adecuada. Esto implicará la aplicación de tests de clasificación pertinentes para determinar si el exceso está impidiendo el cumplimiento del buen estado químico.
Como resultado de estas dos fases y atendiendo a la extensión de las zonas afectadas por contaminación difusa y/o puntual y a la disminución significativa de la calidad química y ecológica de las masas de agua superficiales asociadas, en 2015 se ha determinado que 22 de las 105 masas de agua subterránea de la Cuenca se encuentran en mal estado químico. Todas ellas son masas de agua con una gran explotación agrícola y se localizan básicamente en el eje del Ebro y en los aluviales de sus principales afluentes.
Es posible acceder a los diagnósticos de las masas en riesgo desde el año 2008, consultando el correspondiente capítulo del informe C.E.M.A.S (Control del Estado de las Masas de Agua):
AÑO | INFORME | MAPAS |
2008 | ||
2009 | ||
2010 | ||
2011 | ||
2012 | ||
2013
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2014 | ||
2015 |